La FEU y el marxismo

Como escribir post es mas fácil que hacer videos llenaré este momento improductivo con unos caracteres digitales.

La Universidad de la habana, como centro multisocial que es agrupa estudiantes de todo tipo de pensamiento e ideología, religiosos, ateos, comunistas, anarquistas, liberales, opositores y talibanes. Pero si hay algunas generalidades que se cumplen para la mayoría:

Lo primero es que el discurso político oficial resulta ser un tabaco, una cucharada que hay que tragarse pero que a nadie le gusta.

Lo segundo es que casi nadie está para meterse en (demasiados) líos. Y es así que la mayoría asiste a las actividades orientadas y programadas (políticas o de cualquier tipo) en las que incluso hay espacio para la diversión no porque produzca alegría o euforia el proceso ideológico del que se forma parte y del cual, increíblemente, a veces no se es ni muy consciente; sino porque es la forma de matar el ocio en ese momento aciago (como diría Les Lutieres).

Y lo tercero y más importante, las clases de Marxismo son batallas campales de los alumnos contra el profesor, más bien de los alumnos contra la asignatura.

Aunque los pasillos, los recesos, las playas y las vacaciones, son momentos y lugares en que florece el debate político o social no son sino las clases de Marxismo donde la gente descarga en la figura del profesor toda su inconformidad. Es muy divertido pues por lo general son viejos bastante conservadores, sobre todo los que imparten en facultades de ciencias, y se topan con una resistencia feroz y muy unilateral.

La mayor parte de la clase es una algarabía caótica y al final un profesor agotado se retira a su cátedra sin haber dado el contenido de ese día porque se le ocurrió hacer un comentario desafortunado sobre algún tópico de la vida en Cuba que despertó tales pasiones que se postergaron los modos de producción y la lucha de clases.

El gran problema básico, fundamental e insoluble es: ¿por qué pinga tenemos que dar marxismo? Siempre hay una predisposición hacia el profesor de esta asignatura que viene como una suerte de conquistador a colonizar nuestra mente SIN AUTORIZACIÓN DE LOS IMPLICADOS porque cuando alguien escogió estudiar física, no tenía demasiado interés en estudiar marxismo como mismo las personas que escogieron estudiar derecho, filosofía o historia no tienen ningún interés en que se les imponga la asignatura Análisis Matemático en su plan de estudios.

No quisiera dejar de mencionar aquí a un personajillo oscuro chivatón y sin talento para el magisterio que acapara el centro de mis recuerdos al respecto y es la profesora Corea que si su segundo apellido fuera Del Norte haría completo honor a ese nombre. Esta mujer de cincuenta y tantos años doy fé que era por mucho lo más odiado de toda la universidad yo he hablado con gente de otras facultades que tuvieron el disgusto de tenerla como profesora y la tienen en igual estima. Reaccionaria oficialista y cerrada, era de estas personas que niegan la realidad, y aunque toda el aula le llevaba la contraria ella pretendía que se aceptara que lo que decía era lo que estaba bien.

Pero tampoco quisiera descalificar a todos. Tuvimos una profesora muy buena que daba la clase de Economía política (o algo así) que aunque a nadie le interesaba la asignatura y ella lo sabía, siempre el trato fue cordial y era una persona inteligente que la cual se podía debatir sin que la sintiéramos el enemigo.